La obra continúa el viernes 12 y sábado 13 de abril en la Sala Manuel Rueda en el Parque Iberoamérica
SANTO DOMINGO.- “La Casa de Bernarda Alba” se presentó a casa llena en la Sala Manuel Rueda de la escuela de Bellas Artes, con una magnífica puesta en escena que logró impactar al público de principio a fin, con magistrales actuaciones y una espectacular escenografía a cargo de Fidel López, quien logró expresar en cada detalle lo escrito por el poeta y dramaturgo, Federico García Lorca en 1936.
López también estuvo a su cargo la producción general y junto a la maestra María Castillo, en la dirección general, lograron reunir en un mismo escenario a primerísimas actrices que durante una hora y 15 minutos interpretaron de manera consecutiva la obra cumbre de Lorca, la cual se fragmenta en tres actos.
La veterana actriz Elvira Taveras interpretó tan perfectamente el personaje principal de esta obra, Bernarda Alba, que desde que subió al escenario cautivó a los espectadores con esa personalidad de mujer indomable, fuerte, implacable y estricta que de manera opresiva cría sus cinco hijas.
Solo una actriz con la profesionalidad de Elvira Taveras es capaz de interpretar un personaje tan controversial y a la vez tan complejo como Bernarda Alba, quien, tras haber enviudado por segunda vez a los 60 años, decide vivir los siguientes ocho años en el más riguroso luto y que domina a sus hijas por el fanatismo religioso y el miedo a descubrir su intimidad, caracterizado por una sociedad del siglo pasado.
De igual manera, la actriz Isabel Spencer en la piel de “La Poncia” conquistó a los presentes por su acertada actuación y dominio de escena al interpretar a esa mujer astuta y observadora, criada de Bernarda Alba, que ha trabajado para la familia durante 30 años.
También formaron parte de esta gran producción con excelentes actuaciones Wendy Alba, quien interpretó a María Josefa, la madre demente de Bernarda y a “La Mendiga”, una mujer que encarna el símbolo de la pobreza y la marginalidad; Johanna González fue “La Criada”, testigo silencioso de los conflictos y representa la voz de la servidumbre en un hogar dominado por la opresión y las divisiones de clase; Nileny Dippton representó a “Angustias”, la hija mayor de Bernarda Alba, quien lleva consigo la carga de la soledad y las expectativas familiares; Judith Rodríguez, personificó a “Martirio”, una mujer compleja y oscura; Paloma Palacios, interpretó a “Magdalena”, una mujer melancólica que cuestiona el papel de la mujer en el matrimonio y manifiesta abiertamente su oposición a casarse.
También forma parte del elenco Lía Briones, quien fue “Amelia”, la hija dócil y obediente, que se ajusta a las normas y expectativas impuestas por su madre y la sociedad; Mary Gaby Aguilera, en la piel de “Adela”, la más joven de las cinco hermanas, se caracteriza por su espíritu libre y su deseo de romper con las restricciones impuestas por su madre y la sociedad.
“La Casa de Bernarda Alba” tuvo un final impactante con una escena dramática en la que ocho actrices dominaron el escenario apoyándose en un juego de luces y sonidos impecables, logrando poner en contexto el grito de una sociedad injusta, caracterizada por una sociedad tradicional y muy violenta en la que el papel que desempeñaba la mujer era secundario.
Esta gran puesta en escena bajo la dirección de María Castillo; asistente de dirección Wendy Alba, asistente de producción, Jesús Zapata; regiduría, William Rodríguez y Amaury Esquea; realización de escenografía, Skene Taller de Diseño; sonido y musicalización, Milton Cruz; iluminación, Ernesto López; vestuario, María Castillo y Fidel López; confección de vestuario; Melany Mijares; maquillaje, Francis de la Cruz, y utilería, Jesús Zapata y Ricardo Reyes.
Las boletas están a la venta en Uepa Tickets y Fundación Sinfonía.