Por: Carolina Ramírez | Especialista en Seguridad
@MujerSeguridad
Como parte de las acciones de distanciamiento social impuestas por el gobierno dominicano, para hacer frente a la epidemia del coronavirus COVID-19, desde el viernes 20 de marzo pasado, fue establecido, mediante decreto del Poder Ejecutivo, un toque de queda en todo el territorio nacional, que en principio inició desde las 8:00 PM hasta la 6:00 AM del día siguiente; y una semana después, tuvo que ser ampliado para cumplirse desde las 5:00 de la tarde hasta las 6:00 de la mañana.
Llama poderosamente la atención cómo los agentes de la Policía Nacional y demás cuerpos de seguridad pública deben, enfrentarse cada noche a los desafíos de la desobediencia social e irresponsabilidad de muchos ciudadanos que siguen violando el toque de queda, poniendo en riesgo su salud y la de sus familiares.
Hasta el momento más de casi 40 mil personas han tenido que ser detenidas, transitando en la vía pública en horario de toque de queda, sin justificación alguna y muchos de ellos, han sido reincidentes. Representando esto un alto costo, económico, logístico y de otros recursos que bien pudiera estar destinando el gobierno a compra de insumos y medicamentos para combatir los efectos del COVID 19.
Desde el primero de abril, se han tomado medidas más drásticas contra los detenidos por no acatar el toque de queda, que incluyen: pago de multa, trabajo social y registro en los archivos policiales por desobediencia civil, este último debería asustar mucho a las personas, porque cuando pase la crisis, tener un antecedente policial podría cerrarle las puertas, para conseguir un empleo, una beca e incluso obtener una visa o una residencia en otro país.
Aún así, pareciera que estas medidas no han logrado desincentivar que los dominicanos sigamos como chivos sin ley, porque cada noche se suma un promedio de 1,400 nuevos detenidos.
A los ciudadanos de bien, al menos nos alivia saber que los casi 20 mil vehículos, en su mayoría motocicletas, le han sido retenidos a estos irresponsables y que los mismos no les serán devueltos a sus propietarios, hasta que pase el estado de emergencia en el que estamos. Y para recuperarlos tendrán que agotar un odioso proceso burocrático, que incluye el pago de una merecida multa y tener los documentos de propiedad del vehículo al día y sin contravenciones pendientes.
Si eres de los que, como yo, han decidido respetar la autoridad y quedarse en casa, te felicito, porque así se hace ciudadanía responsable.
Si, por el contrario, estabas pensando salir a dar una vuelta en horario de toque de queda, deberías detenerte a pensar si vale la pena, ponerte en riesgo de ser apresado, multado y cargar con una ficha en tu expediente, que más temprano que tarde, si sobrevives al Coronavírus, podría hacerte la vida de cuadritos.