Por: Henry Almonte
Son dos conceptos que las personas no saben diferenciar, existen interpretaciones y puntos de vista diferentes en cuanto a contextos de la comunicación. El fotógrafo congela la realidad y el fotógrafo artista expresa la conexión que tiene con ella, la manera de entender al mundo, la percepción que luego ha de convertirse en materialización a través de un medio que puede expresarse bajo un lenguaje visual, mediante el uso de técnicas, y la búsqueda interna reflexiva que hay que afrontar para encontrar una buena imagen.
Un fotógrafo artista se destaca por el impacto en sus imágenes, por la sencillez y manera creativa de contar una historia sin importar el medio.
Con el pasar de los años la fotografía sigue en su etapa ascendente abrazando intensamente a la tecnología y sus avances, la que generalmente a un fotógrafo no experimentado confunde o le limita llevándole a buscar mejor equipo creyendo que va a realizar mejores fotos.
Esto no quiere decir, que una buena adquisición de equipo no sea de ayuda, Sí lo es; nos facilita el trabajo, pero solo es un aparato electrónico. Ten claro que tu calidad como fotógrafo no tiene nada que ver con el equipo que tienes. El ser fotógrafo artista es la combinación de mucha observación, práctica y una ingeniosa construcción de la imágen. Recomiendo equipos acorde con nuestras necesidades, la tecnología no tiene fin y en casos se desvía mucho del verdadero avance que se requiere para llegar a ser buen artista del lente.
La cámara no hace al fotógrafo, la fotografía, como todo arte es una disciplina, un acto de entrega, creatividad, trasformación, información, conocimiento, y valentía.